El bordado es un oficio milenario que perdura en un taller como el nuestro, donde la tradición se encuentra con la innovación. Nuestros expertos dan vida al poder del detalle y la originalidad de una inspiración en cada bordado. Básicamente somos un centro de alto rendimiento en el sector téxtil y nos dedicamos a lo q mas nos gusta, el bordado.
Hace más de 20 años, nuestra fábrica de bordados abrió sus puertas en el barrio de Sants de Barcelona. Nuestros inicios son de carácter completamente industrial complementando al sector del vestuario profesional su personalizacion de prendas.
Con el tiempo nos propusimos adaptar nuestro servicio para atender publico más cercano a modo particular.
Desde entonces, la compañía ha más que duplicado y se ha expandido para ofrecer los mejores materiales de bordado. Nuestro equipo les ofrece la experiencia, la tecnología y los recursos necesarios para adaptarse a las necesidades de nuestros clientes.
Recibimos entre 2 y 3 entregas y recogidas diarias de nuestros clientes mas activos : hoteles, restaurantes, supermercados, transportes, logísticas, aviación, son algunos de los sectores profesionales que surtimos, en tiempos ultrarápidos.
20 años después seguimos con nuestro propósito de aportar a nuestro entorno la mejor relación calidad/precio aportando nuevas líneas de consumo téxtil, más sostenibles y cuidadosas con el medio ambiente.
En este 2022 ampliamos nuestro taller/tienda adquiriendo un nuevo local. Ampliamos la gama de producto apto para el bordado y así ofrecer al público de manera más cercana nuestro servicio con un precio justo y asequible.
En términos simples, ¡tenemos las herramientas y los recursos internos para hacer el mejor trabajo!
Para la historia de Cataluña y, muy especialmente, de su capital, la importancia de la manufactura de las indianas rae en el hecho que puede ser considerada el punto de partida del proceso de industrialización.
Los inicios de la Barcelona industrial están estrechamente vinculados a unas telas de algodón de orígenes asiáticos. Eran unos tejidos nuevos, que destacaban no tan solo por sus propiedades higiénicas, sino sobre todo por la vistosidad de los colores y dibujos, y también por la multiplicidad de usos. Acontecieron un producto estratégico, que permitió situar Barcelona en el mapa de la primera industrialización europea y la convirtió en una de las principales ciudades manufactureras del continente.
La principal transformación inducida por este proceso fue el desarrollo, por fin, de la hilatura en Cataluña, gracias al hecho que la exportación masiva de sábanas pintadas a las colonias favoreció la importación de algodón en rama americano en buenas condiciones de calidad y precio. Un hecho clave, puesto que fue allá donde tuvo lugar el inicio del cambio técnico que asociamos a la revolución industrial.
